Por
El año 2018 comenzó sin anuncios
sobre la importación de medicinas para las personas con enfermedades
crónicas y con denuncias de desabastecimiento hasta de 90% en la
Farmacia de Alto Costo del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales.
Los cambios en 2017 fueron políticos y no operativos. Solo se informó
que el ministro para la Salud, Luis López, asumiría la Presidencia de
forma provisional, y que el viceministro Exavier Campos, además de estar
al frente del ministerio y del hospital J. M. de los Ríos, ahora
también ocupará el cargo de director de Salud del IVSS.
Desde que hace 40 días el general
Carlos Rotondaro fue sustituido por el ministro Luis López en la
Presidencia del IVSS que tuvo a cargo por 10 años, momento en que fue
removida también la directora de la Farmacia de Alto Costo, Mercedes
Pereira, no hay información sobre el suministro de medicamentos. La
dirección que se encarga de abastecer de fármacos a pacientes, está
vacante.
La última importación conocida fue
realizada por Rotondaro, quien ya como ex presidente del organismo
notificó a través de su cuenta en la red social Twitter que a los 3.066
pacientes trasplantados les llegarían 50.000 tabletas de micofelonato,
10.000 de ciclosporina de 25 miligramos y 80.000 de 50 miligramos, entre
los meses de noviembre y diciembre, y otras 135.000 tabletas de
tacrolimus (para evitar el rechazo de órganos) llegarían el 20 de
diciembre.
Este abastecimiento para los
trasplantados gestionado por Rotondaro solo duró 15 días, y de acuerdo
con la información hoy solo se entrega prenidsona para estos pacientes y
se cuentan 20 afectados que perdieron un riñón y debieron volver a la
diálisis. Además, no hay 90% de las quimioterapias según oncólogos y
hematólogos. De nueve medicamentos para tratar la leucemia linfoblástica
aguda en sus diferentes fases del protocolo médico, solo se tienen tres
de ellos, según especialistas en oncología infantil.
Katiuska Salinas, presidenta de la
Asociación Venezolana de Hipertensión Pulmonar, denunció que 10
pacientes fallecieron en 2017 porque estuvieron un año sin el
medicamento bosentán y desde hace tres meses ya dejaron de despacharles
nuevamente el tratamiento que los mantiene con vida. “Nosotros tenemos
una enfermedad mortal y nuestra medicina cuesta 11.000 dólares. Es
imposible costearla”, denunció la activista y paciente.
Desde hace tres años tampoco se
cuenta con los factores de coagulación 7 y 9 para los hemofílicos,
mientras que solo queda factor 8 de coagulación que se compró en
bolívares durante la gestión de Rotondaro.
El cese de divisas. Pese a que Rotondaro declaró en
junio del año pasado que el ente tenía capacidad de respuesta y negó
que hubiese una crisis humanitaria, fuentes del IVSS aseguran que el
organismo recibió un recorte abrupto de divisas de la tasa preferencial
de 10 bolívares para importar medicinas desde febrero de 2015, lo cual
impidió las posibles transacciones para la obtención de medicinas que
pueden mantener con vida a los pacientes crónicos.
La compra de medicamentos empezó a
depender de subastas a tasa Dicom o de importaciones que se pudieran
negociar en bolívares, como las que ocurrieron con el material para la
diálisis peritoneal. Pocas adquisiciones, como parte de los elementos
para la diálisis, se siguieron pagando al dólar preferencial.
En 2017 solo se lograron realizar dos
importaciones de medicamentos para trasplantados a través del Fondo
Estratégico de la Organización Panamericana de la Salud, mientras que la
promesa de adquirir fármacos para el cáncer que hizo a través de esta
vía la ex canciller Delcy Rodríguez en diciembre de 2016 sigue en deuda.
“La crisis humanitaria no puede depender del diálogo”
La crisis en el sector salud era uno de los seis puntos que se abordaría en el diálogo que retomaron la oposición y el gobierno en diciembre del año pasado, pero hasta la fecha no ha habido avances en esta materia.
El presidente de la Coalición de Organizaciones por la Salud y la Vida, Francisco Valencia, reiteró que la propuesta que llevó la MUD a los cancilleres en República Dominicana está avalada por la Organización Panamericana de la Salud para establecer un mecanismo de cooperación internacional viable a fin de paliar la crisis, pero el gobierno no se ha reunido en este diálogo con los activistas de derechos humanos que representaron a la sociedad civil afectada.
“Me extraña mucho que hasta el momento Luis López no haya explicado de qué manera están tomando correctivos en el Seguro Social para atajar esta crisis, cuando él mismo aseguró que no permitirá la ayuda humanitaria. Esta crisis no puede depender de la espera de una negociación”, reiteró Valencia.